Elegir el desecante adecuado para el transporte marítimo de mercancías depende de varios factores clave, como el tipo de mercancía, las condiciones ambientales y la duración del viaje.
- Identificar el tipo de mercancía
El tipo de producto que se transporta influye directamente en la elección del desecante, ya que ciertos materiales son más sensibles a la humedad que otros.
-Mercancías sensibles a la humedad: Electrónica, productos farmacéuticos, alimentos secos, textiles, calzado, productos de papel.
– Desecante adecuado: Gel de sílice o Cloruro de calcio.
- Condiciones climáticas del trayecto
– Altos niveles de humedad: Si la ruta atraviesa zonas tropicales, marítimas o húmedas, es más probable que se requiera un desecante con alta capacidad de absorción.
– Desecante adecuado : Cloruro de calcio, ya que puede absorber hasta el 300% de su peso en agua.
- Duración del transporte
La duración del viaje marítimo es crucial porque determina cuánto tiempo deberá absorber el desecante la humedad sin saturarse.
-Viajes cortos (menos de 10 días): En estos casos, es posible utilizar desecantes con una capacidad de absorción moderada.
– Desecante recomendados: Arcilla activada o gel de sílice.
– Viajes largos (más de 10 días): Necesitarás un desecante con alta capacidad de absorción debido al mayor riesgo de acumulación de humedad.
– Desecante adecuado: Cloruro de calcio o una mayor cantidad de gel de sílice.
- Tamaño y tipo de contenedor
-Contenedores grandes (40 pies o más): La cantidad de desecante debe aumentar proporcionalmente al tamaño del contenedor para asegurar una cobertura adecuada.
– Solución: Utilizar varias bolsas de desecante distribuidas uniformemente dentro del contenedor.
– Contenedores más pequeños: Unas pocas bolsas de desecante, dependiendo del volumen, pueden ser suficientes.
– Solución: Generalmente, bolsas de gel de sílice o de arcilla activada en puntos estratégicos.
- Normas y regulaciones del país de destino
Algunos países tienen regulaciones específicas sobre el uso de desecantes y su composición, especialmente en el transporte de productos alimenticios o farmacéuticos.
– Solución: Asegúrate de utilizar desecantes certificados, no tóxicos, y que cumplan con las regulaciones locales y estándares internacionales.
- Sensibilidad del producto al contacto directo con el desecante
Si la mercancía no puede estar en contacto directo con el desecante (por ejemplo, productos alimentarios o electrónicos), selecciona un desecante encapsulado en bolsas seguras.
-Desecante adecuado: Bolsas de gel de sílice o cloruro de calcio encapsulado.